Cristián Tapia y los suplementos alimenticios: "En ningún caso reemplazan a los medicamentos"

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El consumo de suplementos alimentarios va en constante aumento en la población chilena y mundial, y cada vez es mayor la visibilidad y distribución que tienen estos productos en la industria farmacéutica. En este sentido, ¿en qué consisten?, ¿qué resultados se pueden esperan con su consumo?, ¿qué precauciones hay que tener al momento de elegir uno de estos productos?

En una nueva edición de Entrevistas Bio Bio Tv, se conversó con Cristián Tapia, académico del Departamento de Ciencia de los Alimentos y Tecnología Química de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, quien en esta oportunidad

¿Para qué sirven?

“Los suplementos alimentarios están definidos en el Reglamento Sanitario de Alimentos, no son medicamentos y tienen la forma de un producto farmacéutico que contiene ciertos nutrientes, que fueron diseñados inicialmente para complementar nutrientes que faltaban en la etapa de desarrollo del ser humano y después la etapa de declive durante la vejez”, explicó el académico.

Sin embargo, con los cambios en el estilo de vida de la sociedad que ocasionaron un aumento de enfermedades crónicas no transmisibles, y llevó a “este boom del consumo indiscriminado de los suplementos alimenticios, con el sentido de una acción como medicamento y no como de suplemento”, enfatizó.

Sumado a lo anterior, sostuvo que “la venta de estos productos por internet no tiene un control desde el punto de vista de la salud pública riguroso”, y agregó que “todo esto hace que se genere una confusión bastante importante respecto a su uso”.

Actualmente, es posible ver que “hay un cambio generacional, hay una obsesión con la alimentación en las generaciones más jóvenes, y también hay una tendencia alimentaria a consumir más productos de origen vegetal y abandonar un poco lo animal”, comentó.

“Todos estos efectos sociológicos llevan a que la gente esté muy preocupada de qué cosas consume y relice balances nutricionales”, explicó.

Mitos y verdades

“Normalmente, como son nutrientes normalmente presentes en la dieta, los rangos de seguridad son bastante elevados, a diferencia de los medicamentos, que tienen un rango estrecho”, explicó Tapia.

Entonces, “en realidad no hay gran peligro en su sobreconsumo, salvo que, por ejemplo, hay gente que tenga problemas renales, problemas de filtración, de eliminación de ciertos componentes desde la sangre”, sostuvo.

Sin embargo, “una persona adulta que tiene una dieta balanceada no tiene necesidad de consumir suplementos alimentarios”, explicó.

Por otro lado, en el caso de consumir estos productos, estos deben tener estar bajo el “Registro Sanitario de Alimentos, porque eso indica la formulación del suplemento fue desarrollada de acuerdo a las especificaciones correspondiente al contenido de vitaminas, minerales y fibra”, destacó.

“Lo otro que uno tiene que fijarse es en el envase, porque todos estos materiales son muy sensibles a la luz, al calor y por lo tanto la calidad del envase aseguran la estabilidad de los principios activos”, enfatizó.

En suma, hay que observar “la rotulación, la fecha de vencimiento y la calidad del envase, eso dice bastante acerca de la calidad del producto que está dentro”, sostuvo.

Te invitamos a revisar la entrevista completa en Bio Bio TV.

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El consumo de suplementos alimentarios va en constante aumento en la población chilena y mundial, y cada vez es mayor la visibilidad y distribución que tienen estos productos en la industria farmacéutica. En este sentido, ¿en qué consisten?, ¿qué resultados se pueden esperan con su consumo?, ¿qué precauciones hay que tener al momento de elegir uno de estos productos?

En una nueva edición de Entrevistas Bio Bio Tv, se conversó con Cristián Tapia, académico del Departamento de Ciencia de los Alimentos y Tecnología Química de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, quien en esta oportunidad

¿Para qué sirven?

“Los suplementos alimentarios están definidos en el Reglamento Sanitario de Alimentos, no son medicamentos y tienen la forma de un producto farmacéutico que contiene ciertos nutrientes, que fueron diseñados inicialmente para complementar nutrientes que faltaban en la etapa de desarrollo del ser humano y después la etapa de declive durante la vejez”, explicó el académico.

Sin embargo, con los cambios en el estilo de vida de la sociedad que ocasionaron un aumento de enfermedades crónicas no transmisibles, y llevó a “este boom del consumo indiscriminado de los suplementos alimenticios, con el sentido de una acción como medicamento y no como de suplemento”, enfatizó.

Sumado a lo anterior, sostuvo que “la venta de estos productos por internet no tiene un control desde el punto de vista de la salud pública riguroso”, y agregó que “todo esto hace que se genere una confusión bastante importante respecto a su uso”.

Actualmente, es posible ver que “hay un cambio generacional, hay una obsesión con la alimentación en las generaciones más jóvenes, y también hay una tendencia alimentaria a consumir más productos de origen vegetal y abandonar un poco lo animal”, comentó.

“Todos estos efectos sociológicos llevan a que la gente esté muy preocupada de qué cosas consume y relice balances nutricionales”, explicó.

Mitos y verdades

“Normalmente, como son nutrientes normalmente presentes en la dieta, los rangos de seguridad son bastante elevados, a diferencia de los medicamentos, que tienen un rango estrecho”, explicó Tapia.

Entonces, “en realidad no hay gran peligro en su sobreconsumo, salvo que, por ejemplo, hay gente que tenga problemas renales, problemas de filtración, de eliminación de ciertos componentes desde la sangre”, sostuvo.

Sin embargo, “una persona adulta que tiene una dieta balanceada no tiene necesidad de consumir suplementos alimentarios”, explicó.

Por otro lado, en el caso de consumir estos productos, estos deben tener estar bajo el “Registro Sanitario de Alimentos, porque eso indica la formulación del suplemento fue desarrollada de acuerdo a las especificaciones correspondiente al contenido de vitaminas, minerales y fibra”, destacó.

“Lo otro que uno tiene que fijarse es en el envase, porque todos estos materiales son muy sensibles a la luz, al calor y por lo tanto la calidad del envase aseguran la estabilidad de los principios activos”, enfatizó.

En suma, hay que observar “la rotulación, la fecha de vencimiento y la calidad del envase, eso dice bastante acerca de la calidad del producto que está dentro”, sostuvo.

Te invitamos a revisar la entrevista completa en Bio Bio TV.