Causa y Efecto: ¿Por qué no se le otorgó seguridad a la familia de Ronald Ojeda en Chile?

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El Gobierno de Javier Milei, del país vecino, otorgó refugio a los familiares del exmilitar venezolano asesinado en nuestro país

Este jueves, en un reportaje de Biobiochile, se dio a conocer que la familia de Ronald Ojeda, quien fue asesinado durante este verano en Chile tras haber sido secuestrado, recibió refugio en Argentina.

La familia del exmilitar venezolano sentía inseguridad viviendo en nuestro país y nunca se le otorgó algún tipo de protección, ni por parte de Tribunales ni del Ministerio del Interior.

Para poder ofrecer escolta a personas en potencial peligro, existen dos mecanismos. Uno es que se instruya desde el mando policial y el otro es que desde el Poder Judicial se informe que existe la posibilidad de un atentado o un ataque. Esta última se ha presentado en casos de algunos políticos, por ejemplo.

La pregunta que surge es porqué no se estudiaron estas alternativas junto a la familia del venezolano, quienes denunciaron que se habían sentido amenazados por personas que deambulaban cerca del lugar donde permanecían.

A partir de esta situación es que la viuda y la hermana de Ojeda le dieran un mandato a su abogado, Juan Carlos Manríquez, quien viajó a Buenos Aires para reunirse con ciertas personas y negociar que el Gobierno de Milei les pudiese dar un “status de protección”, lo cual finalmente se concretó esta semana.

Cabe mencionar que en el contexto internacional, esta situación deja muy mal a Chile. Esto debido a que se producen una serie de cuestionamientos en torno a porqué no se le otorgó la seguridad desde este lado de la cordillera.

¿Otras prioridades?

Asimismo, pareciera ser que hubo una falta de proactividad por parte de las autoridades nacionales. Posiblemente, los políticos estaban dando prioridad a otros asuntos.

Sin embargo, el punto central que que denota este hecho es la incapacidad del Estado para garantizar seguridad a quienes lo requieren y dotarse de las herramientas para realizarlo. Este caso específico se podría extrapolar a los mismos compatriotas.

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El Gobierno de Javier Milei, del país vecino, otorgó refugio a los familiares del exmilitar venezolano asesinado en nuestro país

Este jueves, en un reportaje de Biobiochile, se dio a conocer que la familia de Ronald Ojeda, quien fue asesinado durante este verano en Chile tras haber sido secuestrado, recibió refugio en Argentina.

La familia del exmilitar venezolano sentía inseguridad viviendo en nuestro país y nunca se le otorgó algún tipo de protección, ni por parte de Tribunales ni del Ministerio del Interior.

Para poder ofrecer escolta a personas en potencial peligro, existen dos mecanismos. Uno es que se instruya desde el mando policial y el otro es que desde el Poder Judicial se informe que existe la posibilidad de un atentado o un ataque. Esta última se ha presentado en casos de algunos políticos, por ejemplo.

La pregunta que surge es porqué no se estudiaron estas alternativas junto a la familia del venezolano, quienes denunciaron que se habían sentido amenazados por personas que deambulaban cerca del lugar donde permanecían.

A partir de esta situación es que la viuda y la hermana de Ojeda le dieran un mandato a su abogado, Juan Carlos Manríquez, quien viajó a Buenos Aires para reunirse con ciertas personas y negociar que el Gobierno de Milei les pudiese dar un “status de protección”, lo cual finalmente se concretó esta semana.

Cabe mencionar que en el contexto internacional, esta situación deja muy mal a Chile. Esto debido a que se producen una serie de cuestionamientos en torno a porqué no se le otorgó la seguridad desde este lado de la cordillera.

¿Otras prioridades?

Asimismo, pareciera ser que hubo una falta de proactividad por parte de las autoridades nacionales. Posiblemente, los políticos estaban dando prioridad a otros asuntos.

Sin embargo, el punto central que que denota este hecho es la incapacidad del Estado para garantizar seguridad a quienes lo requieren y dotarse de las herramientas para realizarlo. Este caso específico se podría extrapolar a los mismos compatriotas.