Una fuerte ola de críticas ha recibido la familia de la realeza de Holanda luego de compartir algunas fotos oficiales de sus vacaciones.
En las imágenes, aparecen la reina Máxima, el rey Guillermo Alejandro y las princesas Amalia, Ariane y Alexia, de las cuales una fue fuertemente criticada por su forma física.
Se trata de Amalia, la hija mayor del matrimonio, que con 14 años de vida ha tenido que soportar miles de opiniones negativas por poseer una robusta figura. Según recoge el portal Vanidades, la adolescente se ha convertido en el centro de crueles críticas, burlas y bromas, en redes sociales, sólo por su aspecto.
Incluso, los medios locales criticaron a los padres de la princesa, acusando una mala alimentación por parte de ellos, quienes fueron defendidos por fuentes cercanas que aseguran que Amalia goza de una buena salud y sólo heredó la contextura de sus padres.
Al respecto, el portal de noticias español ABC, contó que la reina Máxima, oriunda de Argentina, fue vista durante su niñez como una niña “robusta” y con tendencia a engordar, lo que cesó cuando se convirtió en adulta, lo que podría explicar la contextura de Amalia.
Por otra parte, el rey Guillermo Alejandro posee un físico corpulento y una cara redondeada, que también pudieron influir genéticamente en su hija.
En tanto, esta es la primera vez en la historia del país un miembro de la realeza se ve complicado por polémicas, puesto que, a lo largo de la historia, la familia ha sido muy recatada en sus apariciones públicas y con sus dichos y fotografías.
¿Cómo afectan estas críticas a Amalia?
Aunque la familia proteja a su hija de la polémica y Amalia luzca como una joven madura y fuerte, aún así la adolescencia es un periodo complejo para recibir críticas respecto a la apariencia física.
Un boletín publicado por los especialistas de salud de la Johns Hopkins BLoomberg School of Public Health, asegura que este tipo de factores hace que los adolescentes con sobrepeso sean más propensos a estar deprimidos, aislados socialmente y que tengan menos amigos que los demás.
Tal como detalla el documento, los jóvenes entre 13 y 14 años son cuatro veces más vulnerables a tener baja autoestima con este tipo de comentarios, los que terminan por desvirtuar la imagen que tienen de ellos mismos.