El matrimonio por la Iglesia Católica ha sufrido una considerable baja, puesto que el número de nupcias pasó de 28.644 en 2001 a 16.244 en 2014.

En conversación con Podría Ser Otra Cosa, el monseñor Bernardo Bastres, obispo de Punta Arenas, señaló que lo más serio de aquí es qué está pasando con el matrimonio.

Explicó que esta disminución de matrimonios religiosos representa lo que está sucediendo en torno a un sentimiento más profundo existente la sociedad. “A mí me parece que hoy nuestra sociedad no piensa en el compromiso afectivo, que demanda más estabilidad, no es lo que la gente piensa para siempre”, aclaró.

“El Estado se ha visto en la obligación de hacer otras legislaciones para quienes no quieren contraer matrimonio, puedan tener un acuerdo de vida en pareja. Eso está reflejando en que hay un problema más de fondo y creo que indudablemente implica lo religioso, no es algo paralelo a lo que está pasando en la sociedad”, precisó.

Añadió que en Chile cuesta aceptar ciertas normas y protocolos, por lo que lo religioso tiene cierta dinámica.

Por otra parte, señaló que respecto a las segundas nupcias se ha dado un gran paso, ya que el Papa ha agilizado los procesos de nulidad matrimonial.

“Estamos invitando a que la gente lo haga (…) hay un montón de gente que conocemos que tiene segundas nupcias porque objetivamente sabemos que la primera no fue el matrimonio para toda la vida, con algunas consecuencias que no dieron el paso para siempre, estamos regularizando la situación”, precisó.

“Hemos actuado tal vez con principios muy cerrados y nos ha faltado más misericordia y comprensión, en ese sentido estamos haciendo un paso, lento y todo, pero hay un caminar. Estamos mejor parados ahora que en 2013”, aclaró.

Escucha la entrevista realizada por Ángeles Araya en Podría Ser Otra Cosa: