El crucero “Norwegian Sun” tiene programada su llegada a la región de Valparaíso para el próximo martes 25 de abril y solicitó permiso para recalar en el puerto de San Antonio.
Con lo anterior, se ha encendido nuevamente la polémica entre los trabajadores portuarios y las autoridades regionales. Las últimas ven como una amenaza a la industria de cruceros las manifestaciones de los obreros.
Pese a que en los últimos años se han realizado inversiones para mejorar el servicio, el intendente regional Gabriel Aldoney, cuestionó las acciones de los trabajadores, pues considera que están haciendo un enorme daño a Valparaíso.
“Están perdiendo todos”, señaló Aldoney y agregó que el conflicto de las cargas limpias ya ha sido resuelto por los tribunales de justicia. Con la llegada de este crucero se cierra la temporada 2016 – 2017.
Sergio Baeza, presidente de la Cotraporchi, respondió a la autoridad regional diciendo: “Que haga lo que quiera, no nos interesa”. El dirigente indicó que las acciones continuarán y que no pedirán permiso al intendente para manifestarse. “Se está haciendo el leso con el conflicto, porque siempre ha defendido a la empresa portuaria”, finalizó.
El crucero Norwegian Sun tiene capacidad para transportar a 2 mil 400 pasajeros y tomó esta determinación porque el pasado 9 de marzo cuando llegó a Valparaíso, debió desembarcar a parte de sus pasajeros en lanchas, ya que no había sitio de atraque para la nave.