Los cesantes del salmón continúan durmiendo a las afueras de la Intendencia en la Región de Los Lagos, esperando que el Gobierno les entregue una respuesta a sus demandas.
Cuatro días días llevan pernoctando en la intendencia regional los cesantes de la industria del salmón, esperando que el jefe regional, Leonardo de La Prida, les entregue respuestas concretas a su petitorio.
Un bono, capacitación pagada y conseguir puestos de trabajo, es parte de los requerimientos de las 2.500 personas que fueron desvinculadas o terminaron faenas en la industria tras la crisis del salmón.
Karen Aguilar, presidenta del Comité de Cesantes Salmoneros, manifestó que se mantendrán en el lugar hasta que el Gobierno no les entregue una solución, ya que no creen que no existan recursos en el país para ayudarlos.
Marcelo Raimilla, vicepresidente de la agrupación, detalló que a diario reciben familias completas que llegan a contar sus problemas debido a la falta de recursos por no tener un empleo.
Además, los dirigentes piden que el Gobierno demande a la industria para que se investigue cuál es su responsabilidad en la muerte de los salmones y que ocasionó, según ellos, la salida de cientos de trabajadores.