Ariel Trangol, comunero mapuche acusado de participar en el incendio de una iglesia evangélica en el camino a Niágara, en la comuna de Padre Las Casas, inició una huelga de hambre líquida.

Con su decisión, son ahora nueve personas las que han elegido la privación de alimentos como manifestación en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Temuco, sumándose de esta forma a los comuneros investigados en el caso Luchsinger-Mackay.

El imputado negó de forma categórica cualquier tipo de participación en el hecho e indicó que él sólo regresaba a su casa cuando lo detuvieron.

Trangol envió una carta a Luis Torres, fiscal a cargo de la investigación, en la cual expuso que todo lo que le afecta no es efectivo.

Además, dio aviso al alcaide del penal donde se encuentra. Por consiguiente, Gendarmería debe monitorear su situación dos veces al día.

De ser encontrado culpable, Trangol arriesga varios años de cárcel por el delito de incendio.