Destacaron su amistad. Sebastián Piñera y su homólogo argentino Mauricio Macri cumplieron el jueves una ronda de reuniones en el marco de la visita oficial que realizó el mandatario chileno al país trasandino.
Gracias al viaje ambos líderes sellaron una agenda de 19 temas. Entre ellos, acelerar en un plazo de 15 días el envío al Congreso del nuevo TLC entre ambos países y, además, la creación de una comisión binacional de ministros para que supervisen el avance de los acuerdos en materia de pasos fronterizos e infraestructura, cuyo primer encuentro fue fijado para agosto.
Pero el punto que generó mayor polémica fue su entrevista concedida al diario El Clarín de Argentina. Allí habló de diversos temas de interés en las relaciones de ambos países y también a nivel latinoamericano, donde -entre otras cosas- se mostró confiado en la posibilidad de una fusión del Mercosur con la Alianza del Pacifico: un asunto que volvió a señalar en otra entrevista que dio en Argentina a CNN en Español.
Pero también fue consultado directamente por los cuestionamientos en torno al nombramiento de su hermano Pablo Piñera como embajador en el país vecino y a la participación de su primo Andrés Chadwick como titular del Ministerio del Interior.
-¿Cómo piensa resolver el problema, Presidente?, le preguntó el matutino.
-Es muy simple. Un grupo parlamentario presentó el tema ante la Contraloría de la República. Y voy a esperar su resolución para proceder después. Por ahora la designación se congeló.
-Pero también tiene un primo como ministro del Interior…, añadió el periodista.
-Sí, y ha sido diputado, senador, ministro del gobierno anterior, de vasta trayectoria y capacidad. Y está ahí no por ser primo mío. Yo tengo más de 100 primos y hay uno solo que está en el gabinete, recalcó.
De paso recibió el apoyo del canciller argentino Jorge Faurie respecto a la controvertida determinación. “Personalmente conozco a Pablo Piñera desde cuando estuve destinado en Chile, es un hombre de una gran valía personal que apreciamos enormemente, y la designación es una decisión del presidente Piñera”, dijo.
Acto seguido también se sumó la presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, quien es parte de la comitiva y recalcó que “la polémica es absolutamente artificial”.
Así terminó el agitado paso del mandatario por Argentina, que durante la noche del jueves se embarcó hacia Brasil, donde arribó pasada la medianoche para concretar una visita de Estado en el marco del primer viaje oficial de su segundo gobierno.