El Frente Amplio calificó como un precedente el “guiño” de Alejandro Guillier para un eventual pacto político, para derrotar en conjunto a Chile Vamos en las elecciones presidenciales.
Sin embargo, desde la coalición que postula a Beatriz Sánchez cerraron esta puerta, descartando los “cálculos políticos” para privilegiar el despliegue territorial e intentar así llegar a segunda vuelta.
Con el aval de más de 300 mil preferencias en las primarias, aunque lejos del objetivo inicial de los 500 mil votos, el Frente Amplio descartó pactos políticos para llegar a las elecciones presidenciales, incluyendo la segunda vuelta.
Así respondieron dirigentes del bloque a algunos acercamientos del candidato Alejandro Guillier, quien aseguró que los movimientos progresistas en algún minuto deben lograr acuerdos mínimos.
La vocera del Frente Amplia, Karina Olivo, señaló que las palabras del senador son significativas y marcan un precedente para la reciente historia del bloque de izquierda.
Olivo explicó que por ahora el trabajo se centra en recuperar los sectores populares ganados por la oposición durante las primarias, y sostuvo que no habrá espacios para cálculos políticos entre coaliciones.
Sólo en el despliegue territorial en los cinco meses de trabajos se enfocarán los esfuerzos del Frente Amplio. Así lo afirmó Sebastián Depolo, jefe de campaña de Beatriz Sánchez.
El expresidente de Revolución Democrática indicó que la opción es construir un proyecto presidencial de cambios definitivos y no graduales, aludiendo al proyecto de Alejandro Guillier.
El Frente Amplio también tuvo críticas para la Nueva Mayoría. Depolo aseguró que son los únicos perdidos en las presidenciales y reiteró que no habrá acuerdos con ningún comando, ya que será la ciudadanía la que defina el proyecto presidencial en noviembre.