Desde Puerto Rico, se dieron a conocer las importantes cifras que afectan luego de la pandemia por el virus Zika, que al ser contraído por mujeres embarazadas puede generar microcefalia y otras patologías en los recién nacidos, hecho que durante el año pasado alarmó a las autoridades de varios países de Centro y Sur América.
Una de las mujeres contagiadas, es Michelle Flandez, originaria de Chile. “Para mí cuidar de Inti (su hijo) no es un sacrificio… es un sacro oficio, es un oficio sagrado, día a día yo aprendo de él y crezco al lado de él”, manifestó a CNN.
Según el Departamento de Salud puertorriqueño, ella fue la primera mujer en tener un hijo con microcefalia en ese país, en octubre de 2016. Hasta marzo de este año, las autoridades locales registraron 1.924 bebés de madres contagiadas con Zika y las personas infectadas son 39.984.
Haber contraído el virus se ha tranformado -inclusive- en un problema social, explicó María Fernández, del grupo de apoyo Impactivo que ayuda a las personas infectadas. “El Zika se ha vuelto como el VIH hace varias decadas, con un estigma enorme”, dijo.
En tanto, Flandez -con esperanza- afirmó que su hijo “participa de las conversaciones y hace muchas actividades que un niño en teoría con microcefalia no haría”.