Irak anunció este jueves que sus fuerzas arrebataron al grupo Estado Islámico (EI) la ciudad de Tal Afar, uno de los tres últimos bastiones yihadistas en el país, con lo que da por finalizada la reconquista de la provincia de Nínive.
“Nuestra felicidad es total, la victoria ha llegado y la provincia de Nínive ya está completamente en manos de nuestras fuerzas”, afirmó el primer ministro, Haider al Abadi, en un comunicado enviado a la Agence France-Presse, refiriéndose a la región del norte de Irak donde en julio ya habían recuperado Mosul.
El 20 de agosto, las fuerzas gubernamentales y paramilitares iraquíes lanzaron el asalto contra Tal Afar, a 70 km al oeste de Mosul.
El avance fue rápido en esta ciudad, donde vivían 200.000 personas antes de la llegada de los yihadistas. Las fuerzas antiEI se vieron confrontadas sin embargo a una fuerte resistencia de los combatientes del EI en una localidad más al norte, Al Ayadieh, en dirección a Siria.
En 2014, el EI conquistó hasta un tercio del territorio iraquí pero fue perdiendo terreno frente a las múltiples ofensivas lanzadas por las autoridades iraquíes y sus aliados, entre ellos una coalición internacional liderada por Estados Unidos.
Tras la toma de Tal Afar, dos zonas siguen en manos de los extremistas: Hawija, a unos 300 km al norte de Bagdad, y tres ciudades en la región desértica cercana a la frontera siria: Al-Qaim, Rawa y Anna.