Dicen que la tercera es la vencida y para Viola Davis fue este domingo: se llevó el Óscar a mejor actriz secundaria por su papel en la adaptación para el cine de la obra “Fences“.
La actriz de 51 años, nominada en 2009 y 2012, partía como favorita en la categoría, en la que también participaban Nicole Kidman (“Un camino a casa”) y Octavia Spencer (“Talentos ocultos”),
Pero además de llevarse el galardón, la actriz se convirtió en la primera artista afroamericana en ganar un Emmy, un Tony y un Óscar.
Recordemos que en 2015 se llevó el Emmy por su trabajo en la serie How to get away with the murder, y en 2001 fue premiada por con dos Tony gracias a su performance en la obra King Hedley II.
Su discurso
Al aceptar el premio, la actriz emocionó a todos con un discurso que no dejó a nadie indiferente.
“Me convertí en actriz porque somos la única profesión que celebra vivir una vida. Oh mi capitán, mi capitán, Denzel Washington.
Gracias a mi familia, que son el centro de mi universo, el bien y el mal, como caer, como amar, como sostener un premio, como perder.
Mis padres, estoy tan agradecida que Dios los escogiera para traerme a este mundo, a mis hermanas que jugaba conmigo a ser mujeres blancas y ricas en una fiesta de té.
Gracias por la imaginación, por mi esposo y mi hija, mi corazón, ustedes me han enseñado como amar, son las bases de mi vida. Gracias a la Academia”.