“¿Qué hora es en Chile? No se sabe”. Así titula el prestigioso diario estadounidense Wall Street Journal el constante cambio de hora que tiene nuestro país.
En los últimos años, el Gobierno no ha sido capaz de ponerse de acuerdo en el tema, y tras afirmar que mantendría un horario, a los meses después recula y asegura que sí habrá. Eso mismo está afectando a sus habitantes, a la imagen de Chile y también a su economía, según el medio.
“Los cambios estropean las horas en computadores, teléfonos celulares y otros dispositivos programados. (…) El teléfono de una mujer sigue una hora, pero el de su marido otra, arruinando planes para el almuerzo”, ejemplificó el WSJ.
“Pocos lugares juegan con los relojes tanto como Chile”, añadió la publicación que no se explica cómo nuestro país no se rige por la ubicación geográfica en la que está.
Lo anterior ya que “la mayor parte de la ubicación geográfica de Chile corresponde a cinco horas antes” que el horario GMT (-5 GMT), mientras que los relojes locales presentan un tiempo de “dos horas más tarde de lo que se esperaría” (-3 GMT).
Con ello, Chile tiene “la misma zona horaria que Río de Janeiro, que se encuentra a casi 2.900 km al este, en el lado opuesto de América del Sur”. Así fue como “durante el invierno de Chile en junio pasado, el sol no se levantó en Santiago hasta alrededor de las 8:45 a.m”.
La economía también se afecta
Siguiendo su línea editorial de medio de economía, el WSJ citó las afectaciones que genera en las empresas estos cambios. Así es como LATAM Airlines Group debió ajustar 4.300 vuelos, obligando el contacto con 230.000 pasajeros.
La Asociación Chilena de Empresas de Tecnología de Información estimó por su parte que a las empresas les costaría hasta 150 mil dólares hacer todo este tipo de ajustes.
WSJ concluyó que este sábado, día del cambio de hora, muchos chilenos volverán a confundirse, a la espera de una definición en el horario que parece nunca llegar.