El número de migrantes que llegaron a Chile se duplicó en diez años, de 212.935 en 2005 a 410.988 en el 2014, gracias a su estabilidad política y económica, según indicó un anuario del Departamento de Migración.
La llegada de migrantes a Chile ha ido en incremento constante en la última década, llegando en el 2014 al 2,3% de la población del país que alcanza los 17,5 millones de personas, lo cual “está ligado principalmente al fortalecimiento (del país), su crecimiento y estabilidad política”, según el Anuario Estadístico Nacional difundido en la página web del Departamento de Migración.
El informe indica que el fenómeno migratorio en el país se comenzó a producir luego de la llegada de la democracia en 1990, tras 17 años de dictadura de Augusto Pinochet, cuando el número de extranjeros rondaba los 100.000.
La mayor afluencia de migrantes a Chile viene de Perú, que concentra el 31,7% del total de inmigrantes, seguido por Argentina con el 16,3%, y Bolivia con 8,8%. En tanto, la llegada de colombianos subió rápidamente en diez años, del 2,4% a 6,1% en 2014.
“Podemos ver cómo la comunidad de ciudadanos colombianos se ha vuelto relevante, mientras que comunidades más tradicionales como la ecuatoriana (4,7%) y la estadounidense (3,1%) han ido disminuyendo”, explica el anuario.
En cuanto a género, el mayor número de extranjeros lo concentran las mujeres con el 52,6% sobre el 47,4% de los hombres, mientras que por edad, las personas entre 20 y 35 años concentran el 43,3%.
“Ello permite afirmar el carácter laboral de la migración internacional en Chile”, afirma el documento.
En esta línea, la entrega de la visa definitiva para quedarse en Chile se triplicó en la última década, de 11.907 visas en 2005 a 36.024 en 2014.
A este ritmo, según las proyecciones oficiales, en los próximos ocho años se duplicará la cifra de migrantes, por lo cual, el Gobierno se comprometió a enviar al Congreso una nueva ley de migraciones que modifique la que rige, adoptada en 1975.