El estrés, la rutina y las preocupaciones pueden perjudicar notablemente la vida sexual, especialmente si a eso le sumamos sedentarismo.
Según una investigación de las universidades de Indiana y Texas en Estados Unidos, hacer ejercicio antes del sexo puede amplificar el deseo sexual.
Lee también: ¿Las bajas temperaturas realmente influyen en el apetito sexual?
El estudio, recogido por la revista especializada en salud Prevention, fue realizado en mujeres que tomaban antidepresivos, pues comúnmente quienes toman estos fármacos reportan disminución del deseo sexual.
Sin embargo, los investigadores explicaron que estos resultados pueden aplicarse en cualquier mujer.
Los autores llegaron a esta conclusión, tras reclutar a 52 mujeres, a quienes se les pidió a participar realizar 30 minutos de actividad física tres veces a la semana durante tres semanas.
Cuando las mujeres se ejercitaban justo antes de ir a la cama con su pareja, reportaron niveles significativamente más altos de deseo sexual.
El doctor Tierney Lorenz dijo que a diferencia de los hombres -que pueden sentirse excitados sin estimuladores externos- la mayoría de las mujeres sólo se excitan ante la presencia de algún tipo de señal sexual, como juegos previos o imágenes eróticas.
Los efectos del ejercicio -latidos del corazón más agitados y un sentido general de alta excitación física- parecen predisponer el cuerpo de la mujer a las señales sexuales, comenta Lorenz.
Aunque las cualidades excitantes de ejercicios como el cardio duran sólo entre 5 y 10 minutos, la clave está en mezclarlos con entrenamiento de pesas o resistencia, porque así el estado de excitación puede llegar a durar de 30 a 45 minutos después de finalizada la actividad física.
Lorenz dice que si puedes sentir los latidos de su corazón y tu respiración es un poco más rápida de lo normal, estás en un estado ideal para compartir un momento íntimo y agradable con tu pareja.