Sin actividad cerebral se mantiene León Smith, el niño de 4 años quien lleva casi cinco meses internado en el Hospital Clínico de la Universidad Católica en Santiago, en espera de un trasplante de corazón que le permita seguir con vida.
Víctima de una miocardiopatía dilatada que se le detectó al nacer, esta fue deteriorando el funcionamiento de su corazón hasta el punto de necesitar uno artificial. Sin embargo la máquina que debía proporcionarle al menos dos años más de vida en espera de un órgano definitivo acabó por asestarle un duro golpe, al fallar el fin de semana pasado y causarle al pequeño el equivalente a 3 infartos cerebrales. Los médicos estiman que el daño es irreversible.
Ante lo que podrían ser sus últimas horas, la familia, que ha mantenido a la comunidad informada sobre la situación de León a través de redes sociales, entregó un conmovedor mensaje indicando que si el niño fallece, donarán sus órganos.
“Última noche en la UCI. León descansa acostado con su Mami. Ojalá mañana pueda transformarse en donante”, escribieron sus familiares en la cuenta de Twitter @papisxleon, agregando que este domingo a las 8 de la mañana se le realizaría un nuevo escáner en la esperanza de detectar actividad cerebral.
Última noche en la UCI, león descansa acostado con su mami, ojalá mañana pueda transformarse en donante pic.twitter.com/v37U7drg8f
— LuchaxLeón (@papisxleon) 24 de abril de 2016
El padre del niño, Juan Guillermo Smith, hizo un llamado a la donación de órganos, recordando el caso de José Cifuentes, el joven de 18 que falleció esta semana esperando por un trasplante hepático. Su desesperada solicitud encontró el mismo eco en la ministra de Salud, Carmen Castillo, quien llamó a la población a sensibilizarse y donar los órganos de sus familiares fallecidos.
La familia de León hizo también un llamado a la presidenta de la República, Michelle Bachelet, a tomar en serio la creación de una política pública en relación a la donación de órganos. Consideremos que este año, hasta febrero, sólo 24 personas donaron sus órganos. La tasa actual en Chile llega apenas a 7 donantes al año por cada millón de habitantes, muy lejos de los 40 de España o los 50 de Uruguay.