Dos niñas de 13 y 14 años fueron condenadas por el asesinato y tortura de una mujer de 39 años en la localidad de Durham en Inglaterra.
Por este crimen, las jóvenes fueron condenadas a una cadena perpetua revisable, que les asegura al menos 15 años de prisión efectiva.
La extensión de la condena se explica a los complejos métodos de tortura a los que las niñas sometieron a la mujer, agresiones que registraron a través de fotografías y que difundieron por medio de Snapchat.
“El asesinato de Angela Wrightson cometido por las menores fue brutal. Sólo hay que imaginar el miedo y el dolor que debe haber sentido en sus últimas horas de vida“, describió la situación el juez Globe, quien llevaba la causa, consigna El Mundo.
Tortura y fotografías
La noche del crimen, las niñas fueron hasta la casa de la víctima, para pedirle que les comprara cigarros y cervezas, momento que aprovecharon para secuestrarla.
Durante un plazo de al menos 5 horas, las dos niñas torturaron a Angela Wrightson, quien sufría de alcoholismo y llamada como Alco Ange, agrediéndola con diferentes objetos como un televisor, una mesa o una pala.
Según las pericias realizadas, el rostro de Wrightson registraba más de 80 heridas, las que fueron ocasionadas por el actuar de las menores de edad.
Globe no quiso revelar el nombre de las niñas involucrados, pues podría derivar en el suicidio de las involucradas, como ha ocurrido anteriormente.