Este martes al menos diez personas, la mayoría extranjeras, murieron en un atentado suicida cometido en el barrio de Sultanahmet, el más turístico de Estabmul, atribuido por el gobierno a un hombre de origen sirio.
El presidente turco Recep Tayyip Erdogan dijo que el autor del ataque era “un terrorista suicida de origen sirio”, y su primer ministro, Ahmet Davutoglu, aseguró que el suicida pertenecía al EI.
“Hemos determinado que el autor de este ataque terrorista en Sultanahmet es un extranjero miembro de Dáesh (acrónimo árabe del EI)”, declaró Davutoglu a la televisión desde Ankara.
Por su parte el viceprimer ministro turco Numan Kurtulmu confirmó que “la mayor parte” de los fallecidos son extranjeros. Según la oficina del gobernador de Estambul hay al menos diez muertos y 15 heridos cuyo estado no fue precisado.
Turquía está en estado de alerta tras el atentado de hace unos tres meses atrás ante la estación central de Ankara, el más grave de su historia, en el que murieron 103 personas y que fue atribuido al grupo yihadista Estado Islámico (EI).