Estimados amigos de BioBioChile:

Me ha llamado la atención la nota publicada en su medio en relación a una madre que tuvo que esperar 9 horas para una atención de salud.

El problema presentado aquí pasa por un uso inadecuado de un Servicio de Urgencia de Alta Complejidad como es el Hospital de Concepción. El sistema público de salud chileno busca realizar una distribución de las consultas de sus usuarios a lo largo de sus distintos establecimientos según los niveles de complejidad de la atención, y pareciera que los esfuerzos que hemos realizado por que nuestros usuarios lo comprendan no han sido suficientes.

Es lógicamente comprensible que para una madre no siempre será tan sencillo definir el nivel de complejidad y es por ello que al ingreso a los servicios de urgencia se aplica un sistema de categorización o “triage“, que habitualmente establece 5 niveles, donde entre el 1 y el 3 corresponden a atenciones de urgencia vitales a medianas, mientras que el 4 y 5 a urgencias menores o sin urgencia, y que bien pueden ser resueltas en consulta ambulatoria en su CESFAM (Centro de Salud Familiar).

Esta categorización está habitualmente disponible en las salas de espera de los servicios de urgencia, quizás podrían chequear si está en la Urgencia del Hospital de Concepción:

En este caso en base a la evaluación inicial realizada a las 23 horas se categorizó como nivel 4, y por tanto no se priorizó su atención. Tal como bien relata María, la sala de espera estaba llena y debieron haber llamado con prioridad a quienes tenían categorías 1 al 3.

María, en base al problema de salud de su hija, podría haber consultado en el CESFAM donde se encuentra inscrita, solicitando atención a primera hora del día siguiente, o al SAPU (Servicio de Atención Primaria de Urgencia) que le correspondiera durante esa noche, donde le habrían resuelto el problema brindando las mismas indicaciones con un tiempo de espera muy inferior.

Como bien comentaba en un comienzo, tenemos mucho por enseñar a la población sobre el cómo debemos movernos en un sistema que ciertamente es complejo. María indica que recibió un trato amable y por tanto quizás sí se le hizo explícito que podría llegar a esperar el tiempo que lo hizo, o se le orientó a volver a casa y consultar al día siguiente en la atención primaria en vez de pasar toda la noche en espera de una atención.

Sin duda, no existe ninguna dignidad en esa espera, pero tampoco había razón alguna quedarse ahí en vez de resolver el problema en otro lugar al día siguiente.

Comprendo perfectamente que existe una mirada negativa hacia el sistema sanitario, pero el mal uso de los servicios de urgencia sólo contribuye a empeorarlo. Este problema no es sólo chileno, hay muchas campañas extranjeras referidas al sobreuso de los servicios de urgencia y que orientan a un mejor uso del sistema (un ejemplo en este video, otro en la imagen adjunta).

Torbay Hospital | NHS | Traducción de BioBioChile

Torbay Hospital | NHS | Traducción de BioBioChile

Si desde un medio como BioBioChile se pudiera ayudar mostrando esta mirada, ayudarían a muchas personas.

Saludos cordiales,

Jorge López G.
Médico Familiar
Director Sociedad Científica de Medicina Familiar y General de Chile
medicina-familiar.cl@MedFamiliar
buenaspracticasaps.cl@PracticasAPS

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