El ministro tunecino Kamen Jendoubi anunció el jueves la detención de ocho personas “en relación directa con la ejecución” del atentado que causó 38 muertos la semana pasada en un hotel de Túnez.
El ministro encargado de la Sociedad Civil dio esta información durante la primera rueda de prensa sobre la investigación del atentado yihadista más sangriento de la historia de Túnez, cometido, según las autoridades, por un estudiante de 23 años y reivindicado por el grupo Estado Islámico (EI).
“Toda la red detrás de la operación fue descubierta”, añadió, sin precisar si se refería a las ocho personas detenidas o si otros sospechosos fueron identificados sin ser arrestados.
Según anteriores informaciones de las autoridades tunecinas, el autor del atentado, identificado como Seifeddine Rezgui, se formó en el manejo de armas en un campo en Libia, país sumido en el caos y fronterizo con Túnez.
Según las autoridades, es posible que Rezgui conociera a los autores del atentado en marzo contra el museo del Bardo en Túnez, que causó 22 muertos (21 turistas y un policía tunecino).
El ataque al Bardo, que conmocionó a Túnez, país donde se registró un aumento de los movimientos yihadistas desde la revolución de 2011 que derrocó al presidente Ben Ali, fue también reivindicado por el EI.
“En el marco de la cooperación de seguridad entre Túnez y Gran Bretaña, 10 investigadores británicos investigan el atentado”, dijo el ministro.
Con 30 nacionales de las 38 víctimas mortales, Gran Bretaña se llevó la peor parte del atentado. Algunos de los restos mortales fueron repatriados el miércoles y el resto serán repatriados durante esta semana.
Además, para proteger los lugares turísticos, “hubo un despliegue de 1.377 agentes suplementarios de seguridad armados en los establecimientos hoteleros y en las playas”, añadió el ministro Jendoubi.