Angélica Dass es una fotógrafa brasileña que comenzó en 2012 el proyecto visual llamado Humanae. Un inventario cromático humano que busca mostrar a todo el mundo que existen tantos colores de piel como personas en el mundo.
La artista visual presenta miles de retratos, clasificando los rostros según su valor en la escala de Pantone, uno de los sistemas de control de color más usado en la actualidad y que llega a la identificación de 10 mil tonalidades.
Una selección de la muestra de aproximadamente 200 de las 2500 piezas, se encuentra en Chile hasta el 10 de junio, como parte del nuevo ciclo expositivo % Otros, el valor de la diferencia , disponible en el Centro de Extensión (Centex), del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes (Valparaíso).
La brasileña, que proviene de una familia multiracial, nunca ha compartido las prejuiciosas divisiones y discrimnacines sociales en base a la tonalidad de piel y por ello es que pretende mostrar al mundo la importancia y belleza de la diversidad humana.
En cuanto al color de los chilenos la conclusión no es distinta. Así lo reflejan los cientos de compatriotas fotografiados por Angélica a fines de marzo y que, al igual que todos, fueron clasificados con un color en la escala Pantone, dependiendo del color de la punta de su nariz.
“Independiente del color de piel, o las características físicas particulares de cada uno, somos todos iguales. En las imágenes de Humanae no puedes saber de qué país es la gente, dónde vive, de qué religión es, si son pobres o ricos, te ayuda a ver que los prejuicios no necesariamente se cumplen”, fue el coherente mensaje que una visitante a la muestra entregó al medio nacional El Definido.