Perú dio por superado el martes el conflicto con Chile, país al que acusó de espiarlo, y dispuso el retorno de su embajador a Santiago como parte del restablecimiento gradual de sus relaciones, anunció el presidente Ollanta Humala.
“He dispuesto el restablecimiento gradual de nuestras relaciones con Chile, al nivel que tenían antes de este lamentable suceso, empezando por el retorno del embajador del Perú a ese país”, dijo Humala en un mensaje a la nación.
La decisión se produce luego de que Chile enviara recientemente una tercera comunicación a Perú, en la que presenta las satisfacciones -que en lenguaje diplomático es interpretado como “explicaciones satisfactorias”- por lo ocurrido.
“Como consecuencia de los referidos intercambios (de cartas), el gobierno de Chile ha expresado de manera explícita sus satisfacciones al gobierno del Perú, sobre el caso de espionaje denunciado”, aseguró Humala.
“Debo reconocer la actitud constructiva y de diálogo de la presidenta Michelle Bachelet, al deplorar estos hechos en el ánimo de seguir avanzando en el camino de cooperación e integración de nuestros pueblos”, agregó.
El presidente recalcó la importancia para su gobierno de “implementar con Chile una política activa de construcción de confianza mutua, tanto en el nivel oficial como en la sociedad civil”, así como “avanzar en una agenda bilateral de futuro”.
Las relaciones bilaterales entre Santiago y Lima se tensaron el 20 de febrero, cuando Perú presentó una nota de protesta en la que aseguraba que tres marinos peruanos fueron detenidos bajo la acusación de haber vendido información a agentes chilenos entre los años 2005 y 2012.