Luego de que el asesor sociocultural de Gobierno, Sebastián Dávalos, renunciara a su cargo a una semana de conocerse el “Nueragate”, diversas han sido las reacciones en los sectores políticos. Para la oposición “el paso al costado” que dio el hijo la Presidenta Bachelet no es suficiente y se debe investigar más a fondo el Caso Caval.
Por ello, los diputados de Renovación Nacional, Nicolás Monckeberg y José Manuel Edwards, solicitaron en la Fiscalía Nacional que se investigue un presunto “tráfico de influencias” y “uso de información privilegiada” de parte de Caval S.A., empresa de Natalia Compagnon, nuera de Bachelet.
En ese sentido, el diputado Edwards planteó que Dávalos al renunciar, asume la responsabilidad política de la situación pero que “eso no nos entrega transparencia, en un caso que cada vez que se entrega más información hay más opacidad y entendemos menos de por qué puede haber ocurrido algo como lo que ocurrió”.
Edwards expresó que esta investigación no será fácil y que pondrá a prueba la independencia de las instituciones chilenas al tratarse del hijo de la presidenta Bachelet.
“Esperemos que los poderosos de siempre, no se salgan con la suya en el caso de que haya habido un delito, y en el caso de que ellos se hayan enriquecido de manera no normal o de manera irregular”, concluyó el diputado.
Monckeberg: “Al Gobierno le gusta hablar de transparencia pero no practicarla”
Por su parte, el jefe de bancada RN, Nicolás Monckeberg, detalló que “este el primer paso, no hemos evaluado la presentación de una querella, queremos que la investigación avance, que se investigue no solo a los integrantes de la empresa en cuestión, sino también a todos los funcionarios de la sexta región que han tenido relación con el cambio del uso de suelo”, dijo Monckeberg.
Además sobre la comportamiento del Gobierno frente al denominado “Nueragate”, Monckeberg señaló que “al Gobierno le gusta hablar de transparencia pero no practicarla”.
UDI inicia acción judicial por Caso Caval
En el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, la Unión Demócrata Independiente presentó una acción judicial por presuntos delitos de “tráfico de influencias” y “uso de información privilegiada” en el marco del Caso Caval.
Pablo Terrazas, prosecretario de UDI afirmó que pretenden “terminar con el lucro de la familia presidencial, ponerle fin al tráfico de influencias y terminar con el uso de información privilegiada para que un grupo de personeros del gobierno obtengan lucro de manera ilegítima”.
Además, Terrazas aseguró que “el gobierno le puso mucha energía y énfasis a poner fin al lucro en materia educacional, quisiéramos, para que sean consecuentes, que le pongan la misma energía y el mismo entusiasmo a poner fin a este lucro ilegítimo del cual se han beneficiado algunos integrantes de la Moneda”, concluyó.
La denuncia se presentó “en contra de todos quienes resulten responsables, sea como autores, cómplices o encubridores”.