Luego de que ayer se conociera que Ignacio Riveros -el participante que obtuvo el segundo lugar en el programa de cocina MasterChef (Canal 13)- no asistió a dos importantes citas programadas con la estación privada tras el fin del espacio, muchos especularon que el joven de 26 años estaba molesto con el resultado.
Recordemos que durante la gran final celebrada este domingo, se coronó ganadora a la concursante Daniela Castro, lo que despertó la ira de las redes sociales, que tenían como favorito al recolector de basura.
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El primer compromiso que Ignacio declinó fue concurrir al matinal Bienvenidos -ritual que la mayoría de los eliminados del espacio realizó-, y el segundo era participar en la grabación de un capítulo especial de Masterchef, en el cual participarían varios de sus compañeros y donde se descubriría el contenido de una misteriosa caja.
Además, el joven no se quedó a la celebración con todo el equipo del programa después de la final y simplemente se retiró sin hacer declaraciones.
Tras el silencio que mantuvo el lunes, Ignacio habló con el diario La Cuarta, donde se refirió a lo sucedido. “Me cuesta un poco hablar, pero quiero que sepan que no es de mala onda. Yo no opino nada malo, yo sabía que era un concurso culinario y ahí los jueces tienen la razón”, dijo.
“Me fui piola porque no quería ser la burla, pero todo bien. Pedí disculpas y me retiré de buena forma y todos me comprendieron, entonces bacán, cero mala onda”, señaló, explicando porqué no se quedó a la fiesta del fin del espacio televisivo.
Asimismo, confirmó que no acudió a la grabación del programa especial, pero que no se trató de un berrinche como muchos especularon. “Es real, pero hablé con Nakasone y él me autorizó, no hubo problema, igual me comprendió. El estrés fue increíble, viví cuatro meses full, además trabajando”, afirmó.
La pareja de Ignacio, Muriel Martín, también habló con La Cuarta. “No queríamos hablarle más, ni hacerle preguntas. Él lo único que me dijo fue mi amor me voy a tomar esta pastilla (relajante muscular) y déjame dormir y así fue”, manifestó, añadiendo que “Ignacio no va a parar aquí, ni se va a frustrar. Está súper contento igual, la pena que tenía es no tener el trofeo, por él, en ningún caso nada con la Dani. Él está servido y pagado con que los chef más admirables le dieran su voto, esos que ve en la tele”.
Sus proyectos
Al ser consultado si estaba en sus planes abrir un restaurante con el dinero que ganó en MasterChef (10 millones de pesos), Ignacio indicó que era su sueño y lo quería cumplir, sin embargo, tenía otras prioridades por el momento. “Antes que un restorán está mi hogar, pondré un pie para mi casa propia y ahí veremos cómo se generan las lucas para cumplir eso del restorán”, reveló.
Con respecto a las intenciones expresadas durante el programa por los jurados Ennio Carota y Chris Carpentier de trabajar con él, Riveros dijo que las conversaciones con estos chef estaban, sin embargo, no quería hablar públicamente del tema.
Esto último, porque todavía no había nada concreto con ninguno de ellos. “Pero eso sigue en pie. De hecho me han llamado por teléfono y todo”, aseguró.
En tanto, Carpentier dijo que después de sus vacaciones quería hablar con Ignacio, mientras Carota dijo que “parece que (Riveros) no tomó muy bien la final, pero me parece poco inteligente de su parte, porque él es un ganador, espero no eche a perder todo lo que ha hecho”.