Molesto por la falta de coordinación en el mundo público, el intendente metropolitano Claudio Orrego criticó el eventual nuevo cierre de la Plaza de Armas de Santiago para las obras de Metro en torno a la construcción de la futura Línea 3.
Estas obras contemplan un socavón entre la plaza y la Catedral, lo que fue calificado “muy grave” por la alcaldesa Carolina Tohá en declaraciones publicadas por El Mercurio el sábado 6 de diciembre.
Al respecto, Orrego señaló a “La Hora del Taco“, de Radio Universo, que este socavón contraviene el plan de recuperación patrimonial que se ha implementado con 2.300 millones provenientes del Fondo del Patrimonio Cultural, para lo cual ya está en su etapa final la intervención en la fachada y la disposición de nuevos miradores.
“No hemos terminado de inaugurar y ya vamos a entrar a picar nuevamente, porque cada entidad trabaja en el territorio por su cuenta”, expresó el intendente, criticando el hecho que no exista un ente coordinador entre las empresas del Estado, servicios públicos, ministerio y todas las entidades que tengan este carácter.
Las obras de remodelación de la Plaza de Armas abarcaron la restauración de la pileta, cambio de mobiliario y adición de árboles, entre otras faenas que implicaron una inversión municipal superior a los $1.600 millones.
En este marco, Claudio Orrego sostuvo que “es un escándalo en una ciudad como la nuestra” la nueva intervención en vista del dinero colocado en las obras recientemente entregadas, asegurando que “no nos sobra ningún peso”.
Por su parte, Carolina Tohá descartó que este tema se haya generado a raíz de una descoordinación, sosteniendo que Metro cambió el proyecto que se presentó en primera instancia, el cual no habría establecido la existencia del socavón.