La Fundación Sociedad Atea de Chile (Fusach) expresó su rotundo rechazo a la instalación de un pesebre en el Palacio de La Moneda.
La agrupación expresó su molestia con la colocación del símbolo religioso en la casa de Gobierno, calificándolo como un “mal uso de recursos públicos”.
Esto porque el pesebre a tamaño natural, que estará en el Patio de Los Cañones hasta mediados de enero, tuvo un costo de $15.791.300.
El monto incluso superó el gasto que el Gobierno de Sebastián Piñera realizó para instalar la misma estructura el año pasado, cuando costó $14.280.000.
De acuerdo al contrato firmado entre el Gobierno y la empresa de Museografía Alejandra Luhrs, el pesebre debe ser original, no haber sido exhibido anteriormente, adaptarse a la arquitectura del palacio, y requiere tener un ingreso “que permita acceder hasta la figura del Niño Dios en la ceremonia ecuménica que tradicionalmente se realiza en el Palacio de la Moneda”.
Por medio de un comunicado, la Sociedad Atea declaró que “nuestro malestar apunta al espíritu laico que debe imperar en el país, donde no se debe privilegiar un credo por sobre otros”.
En ese sentido, criticaron que la instalación de este símbolo “deja fuera de toda representación a casi un 25% de la población, que no profesa ni el catolicismo ni el protestantismo”.
“Como Fusach luchamos por la consecución de un Estado verdaderamente laico, que también fue parte de la campaña presidencial de Michelle Bachelet, en el que este tipo de atropellos dejen de ocurrir”, recalcaron.
Asimismo, sostuvieron que “la única manera en que un Estado puede respetar todas las confesiones religiosas, o la falta de éstas, es restándose de ellas. Por lo anterior es que se hará llegar una carta formal a La Moneda para que se retire dicho pesebre, cómo un acto de respeto a las minorías”.