Una segunda investigación podría sumarse al expediente de Facundo Jones Huala, por quien se mantiene la sospecha de su vinculación a un nuevo atentado incendiario cometido ésta vez en Bariloche.
El pasado 12 de octubre, un grupo armado llegó hasta el refugio Neumeyer, en la ciudad trasandina, atacando a los dos cuidadores que se encontraban en el lugar. Los sujetos ataron a los hombres a un árbol y rociaron el lugar con combustible, quemando el refugio como también una retroexcavadora y parte del bosque.
La policía argentina encontró entre los escombros, panfletos con consignas mapuches, donde una de ellas citaba “fuera winka capitalista del Wallmapu, fuera represas del kintuante y el Puel Willimapu, fuera petroleras, mineras latifundistas, todo el territorio libre y recuperado para nuestro pueblo”.
El documento, era firmado por el Movimiento Mapuche Autónomo Puel Mapu, al cual pertenecería Jones Huala, sumándose que el comunero ya permanecía prófugo de la justicia Chilena en dicha fecha, siendo buscado tanto en la Provincia del Ranco donde debía cumplir su arresto domiciliario nocturno, pero también en Bariloche, dado que es oriundo de allí.
En conversación con La Radio, el Fiscal Sergio Fuente, señaló que efectivamente las autoridades Argentinas informaron de dicha investigación y sus presunciones, pero que hasta el momento no se ha solicitado ningún tipo de información oficial al respecto.
Consultado sobre la realización del juicio oral, que parte éste lunes y donde ya son 2 los prófugos, Fuente explicó que el lunes se resolverá, dado que son pocas las esperanzas que los dos activistas mapuches sean detenidos durante este fin de semana.
Recordemos que Facundo Jones Huala, figura como uno de los tres encapuchados que llegan al recinto que participaron en el ataque incendiario en el fundo Pisu Pisué, donde amordazaron a un grupo familiar que se encontraba en la vivienda, tras lo cual quemaron el recinto -modus operandis que se repite en el ataque al refugio Argentino-.
La Fiscalía está solicitando por el atentado una pena efectiva de presidio mayor en su grado medio -de 12 años específicamente-, además de 541 días (casi 1 año y medio) por tenencia ilegal de municiones, 3 años por tenencia y porte ilegal de arma de fuego y 1 año y medio más por su ingreso ilegal a tierras Chilenas.