Los Senadores Baldo Prokurica y Guido Girardi, junto a la presidenta del Centro de Conservación Cetácea, Bárbara Galletti, entregaron una carta dirigida al embajador de Japón en Chile, Hidenori Murakami, donde se le adjunta una copia del proyecto de acuerdo -aprobado por unanimidad del Senado- donde se protesta contra el nuevo programa de Caza Científica de Ballenas que Japón realizará en aguas del Pacífico.
“Hemos llegado para entregarle una carta al embajador de Japón, que acompaña al proyecto de acuerdo, donde se le pide a la Presidenta de la República, una nota de protesta frente al Gobierno de Japón, por el inicio del nuevo periodo de caza de ballenas en el ártico”, indicó el senador Prokurica.
Asimismo, el legislador aseguró que “creemos que este es un acto de barbarie, que no tiene nada que ver con una campaña científica, como habitualmente se había dicho, y que en la práctica obedece a un tema cultural –tal como lo ha reconocido el primer ministro Japonés- lo cual lamentamos profundamente”.
“No entendemos que un país tan culto como Japón, insista con esto que es un crimen contra mamíferos que están en riesgo de conservación e indefensos”, sentenció.
En tanto, el senador Guido Girardi, uno de los impulsores de la ley que transforma a Chile en santuario ballenero, lamentó que “Japón insista en una acción criminal contra un mamífero que es símbolo del respeto a la vida. Es una pena que un país con tanto crecimiento y desarrollo económico, tenga la pobreza moral y valórica que expresa el asesinato masivo de ballenas”, consigna Prensa Antártica.
Y agregó que, además, lo hace “con un subterfugio vergonzoso, pues con la modernidad actual no se necesita matar la ballena para hacer ciencia. La tecnología de hoy hace viable estudiar el comportamiento de seres vivos cuando están vivos. Es una falacia y un fraude internacional matarlos para investigarlo. Japón le miente a la comunidad internacional aquí hay un asesinato masivo para consumo humano. Una suerte de canibalismo son mamíferos muy inteligentes, una especie maravillosa que alguna vez fueron parientes nuestros”.
El congresista aseguró que pedirán a la Cancillería se tomen las medidas necesarias y se impartan las órdenes pertinentes para que “la prohibición de cazar ballenas se haga extensiva a los mares de los territorios que Chile reclama en la Antártica y que se aprese a todo barco que ingrese a nuestros mares con ese funesto fin”.