El asesor de la empresa consultora y financiera Deloitte, Marco Antonio Muñoz advirtió que la reforma tributaria sí afectará a la clase media, por lo que confía en que la discusión en el Senado sea más analítica que política.
En conversación con Radio Bío Bío de Puerto Montt, Muñoz aseguró que si bien el objetivo central de la reforma tributaria es recolectar más de 8 mil millones de dólares para asegurar el financiamiento de la reforma educacional, el Gobierno debe transparentar y poner todas las cartas sobre la mesa, en relación a los efectos que repercutirán en la población.
Según explicó, la mayor recaudación va de la mano con el aumento de impuestos; gravámenes que los empresarios traspasarán de una u otra manera a los consumidores.
El asesor evidenció que resulta confuso para la ciudadanía que la reforma se sustente en que los ricos serán los que pagarán más, ya que al tomar en consideración el impuesto de las personas, que hoy está en un 40%, una vez entrada en vigencia, se rebajará a un 35%, lo que no coincide con lo planteado a nivel gubernamental.
Para Marco Antonio Muñoz, la eliminación del FUT es fundamental para lograr una buena recaudación, sin embargo no se puede hacer creer que con estos cambios se terminará la desigualdad en Chile ya que a su juicio, no se puede sustentar el conseguir más recursos sólo con el crecimiento económico, por lo que la reforma era necesaria.
Consultado Muñoz sobre si la clase media se verá afectada con la reforma, el asesor financiero aclara que directamente no, pero habrán elementos como el impuesto de timbres que sí tendrán incidencia.
Muñoz confía que durante la discusión en el Senado se dé un debate más analítico que político, la que tendrá una incidencia en el país, además reparó en un punto poco observado por los conglomerados que defienden el nuevo sistema y es que las proyecciones que se hacen sobre la recaudación de dineros, es sobre la base de un crecimiento sostenido.
Por lo anterior se preguntó ¿qué pasa si los empresarios deciden no invertir? Es en este punto donde hay que tener cuidado, afirmó el experto, ya que el diseño no estaría ajustado a una baja rentabilidad, por lo que los empresarios deben ser escuchados.