Para nadie es cómodo pedir un aumento de sueldo, pero según los expertos, para las mujeres puede ser peor. La razón es que aún existe discriminación hacia ellas en el área laboral y muchas veces ni siquiera es intencional o manifiesta.
Un grupo de especialistas en negociación entrevistados por The New York Times, comentaron entre otras cosas que cuando las mujeres actúan de manera considerada “poco femenina” o “individualista”, a algunas personas les resulta “indecoroso” en un nivel subconsciente.
Por ello, aconsejan a las mujeres considerar ciertas cosas para salir victoriosas a la hora de solicitar un aumento de sueldo o ascenso. De lo contrario, pueden correr el riesgo de ser percibidas como demasiado exigentes y desagradables, y sus peticiones pueden ser contraproducentes, según los especialistas.
“Estamos pidiendo a las mujeres a hacer malabares mientras están en la cuerda floja”, afirma Linda C. Babcock, profesora de la Universidad Carnegie Mellon y fundadora de un programa de equidad de género, quien agrega que “es totalmente injusto porque no exigimos lo mismo de los hombres. Pero si las mujeres quieren tener éxito en este campo, es necesario prestar atención a esto”.
“Cómo las mujeres negocian sus carreras es sin duda un factor determinante” a la hora de aspirar a un mejor sueldo, indica Hannah Riley Bowles, profesora en la Escuela de Gobierno Kennedy de Harvard, que ha realizado varios estudios sobre género y negociación.
Pero no se trata de ajustar su comportamiento a los estereotipos, sino de ser inteligente y tener una estrategia a la hora de hacer la solicitud. Aunque tampoco es del todo malo, según Joan C. Williams, co-autor del libro “Lo que funciona para las mujeres en el trabajo”, quien señala que como “estos estereotipos nos detendrán” en algún momento, debemos utilizarlos para salir adelante.
A continuación te señalamos algunas cosas que las mujeres deben evitar para conseguir el aumento de sueldo que tanto merecen:
1. No tener un registro de tus logros
Pedir un aumento de sueldo no debe ser algo de último minuto que se reduzca a una conversación corta. Por ello, es esencial tener un registro de cada logro que has tenido en tu carrera para que tengas argumentos concretos y medibles que ayuden a ilustrar tu desempeño.
Las mujeres también se benefician cuando otras personas resaltan sus logros, según los expertos. Es por eso que es importante que las mujeres busquen mentores y se rodeen de profesionales que valoren su trabajo.
2. Pedir menos de lo que mereces
Las investigaciones muestran que las mujeres tienden a negociar menos que los hombres y a pedir una paga menor por tareas similares, pese a que hay estándares claros sobre lo que vale cada puesto de trabajo, según el artículo.
Es importante que conozcas tu valor de mercado al hablar con los empleadores, ya que las mujeres tienden a tener salarios más bajos y menores expectativas.
Esto es importante, más aún considerando que las mujeres trabajaban más y cometen menos errores, según las investigaciones.
3. Hablar de “yo” en lugar de “nosotros”
Según un estudio de la profesora Riley Bowles es recomendable hablar de “nosotros” en lugar de “yo”.
Como los estereotipos de género suelen castigar a las mujeres que abogan por sí mismas y son vistas como “egoístas” o “egocéntricas”, la experta dice que es mejor enmarcar la negociación en torno al valor que proporcionas a la empresa.
4. Negociar por correo electrónico
Las conversaciones por correo electrónico pueden ser contraproducentes porque son fácilmente mal interpretadas, así que es mejor negociar en persona.
“Da la impresión de mucha frialdad y dureza, por lo que todas las cosas que las mujeres tienden a hacer en una conversación para suavizar su enfoque, son imposibles de hacer en el correo electrónico”, señala Babcock.
Esto es importante si consideramos que “la investigación no puede ser más clara en que toleramos un comportamiento más agresivo o asertivo en los hombres que en las mujeres”
Además, si envías un correo debes esperar la respuesta y no podrás juzgar con precisión la reacción de tu empleador.
5. Utilizar una oferta de trabajo externa para negociar
Recibir una oferta para un puesto en otra empresa puede parecer una gran oportunidad para negociar un aumento de sueldo, sin embargo, esta táctica puede afectar a las mujeres, ya que pueden ser percibidas como una amenaza, según los expertos.
Babcock y Bowles estudiaron los efectos de la utilización de propuestas de otras empresas para negociar un aumento en la firma actual, y concluyeron que en el caso de las mujeres generalmente es visto como una “actitud agresiva”.
Por ello, si quieres usar esta estrategia debes tener cuidado en cómo lo plantearás. Las expertas proponen expresar que quieres quedarte y si hay alguna posibilidad de que la empresa pueda hacer que eso suceda.