Una compleja e inédita pugna, entre una persona transexual y una isapre, analiza la Corte de Apelaciones de Concepción. El conflicto se centra en la negativa de la institución de salud privada de asumir el costo de la mastectomía parte del cambio de sexo.
La constructor civil de 36 años, de nombre Tatiana, se encuentra actualmente en el proceso que la convertirá en un hombre y que comenzó luego que se le diagnosticara por una serie de médicos su transexualismo.
Como primera etapa del cambio de sexo fue sometida a una mastectomía o la extirpación de sus senos, procedimiento cuyo costo -de alrededor de 2 millones de pesos- es rechazado por la isapre MasVida.
El argumento de la aseguradora es que el transexualismo de Tatiana, residente en la comuna de Las Condes que pasará a llamarse Arturo, es una preexistencia que no fue declarada al momento de contratar el plan de salud.
Ese argumento está siendo cuestionado por la profesional a través de un recurso de protección, el que fue acogido a trámite por la Corte de alzada penquista, con una orden de no innovar que prohibió a MasVida acosar a la afiliada para el pago de la mastectomía.
En la acción legal, se califica como ilegal y arbitraria la decisión de la isapre de negarse al pago del procedimiento quirúrgico, señalando que no hay preexistencia pues el transexualismo fue diagnosticado después de contratar el plan de salud.
Está pendiente el informe de la isapre MasVida de modo que el tribunal de alzada proceda a pronunciar su sentencia.