Un dirigente de la pesca artesanal de Aysén, Juan Carlos Navea, criticó duramente el manejo que ha tenido el Gobierno de la crisis del virus ISA.
Navea denunció que las medidas paliativas para atacar el piojo de mar o cáligus, que transporta el virus, está provocando la muerte de huevos o larvas de otras especies marinas.
El dirigente de la pesca artesanal, quien además es Director de la Comisión Nacional por la Defensa del Patrimonio Pesquero, denunció que los efectos de la industria salmonera hacia la pesca artesanal son graves ya que el arrojo al mar de grandes cantidades de Cipermetrina y Deltametrina no sólo están acabando con las larvas del cáligus, vector que transmite el virus ISA, si no también con otras especies marinas de las regiones de Los Lagos y de Aysén.
El dirigente agregó que “lo alarmante es que los efectos de estos pesticidas duran 48 horas en el agua, y sólo en dos horas mata las larvas de otros recursos pesqueros que se encuentran en el sector, dejándonos sin recursos para el futuro”.
Además, señaló a través de un comunicado que no existe fiscalización ni institucionalidad pesquera, ya que “ni la nueva ley de pesca ni las normas específicas que existen en materia pesquera sirven en la actualidad, porque tanto el ministro Longueira como el subsecretario Galilea sólo se han preocupado de los intereses de los industriales, sin hacer la pega que les corresponde, que es defender los intereses de todos los chilenos y de los pescadores artesanales”.