Las administradoras de pensiones en Chile realizan estudios para mejorar el monto de las jubilaciones. Analizan la rentabilidad y la densidad de cotización, factores que afectan la tasa de reemplazo.
Para simular escenarios es importante el sexo del afiliado, fecha de nacimiento, estado civil actual, edad del cónyuge, condición de salud e hijos.
Un chileno casado debería acumular 93 millones de pesos en su fondo de capitalización para obtener una jubilación de 500 mil pesos mensuales y para cobrar 1 millón debe juntar 186 millones.
Pero 70 de cada 100 pensionados ahorra entre sólo 30 y 50 millones de pesos, y en promedio obtienen una jubilación de 150 mil pesos mensuales.
Todo esto mientras las utilidades de las AFP aumentaron el año pasado en 38% llegando a 582 millones de dólares.
Al jubilar es clave el monto de la pensión y qué porcentaje será de lo que acostumbra a recibir.
Este indicador, que se conoce como tasa de reemplazo, en Chile llega al 64% promedio para los hombres y a 50% para las mujeres.
Nuestro país está en la posición número 18 entre 34 naciones, y se ubica bajo el promedio que llega al 69%, con los últimos 10 años de sueldo de jubilación, considerando damas y varones juntos.
En contraste está Grecia, donde una persona recibe una pensión que es 11% superior a su renta, le siguen Hungría e Islandia.
Juan Ariztía, ex superintendente de AFP, explicó que hay países que pagan jubilaciones con recursos del estado, lo que conduce a que los sistemas de reparto estén quebrados, y las naciones que los sustentan también.
El gerente de estudios de la Asociación de AFP, Roberto Fuentes, precisa que en Chile los trabajadores y empleadores aportan al sistema 12.7% del sueldo mensual, y el promedio en los países de la OCDE, es de 19.6%, por lo que a igual tasa de aporte de estos países, las pensiones en Chile superarían el promedio.
Para mejorar su jubilación, si puede, la fórmula es comenzar a ahorrar lo antes posible, mientras antes sea y más ahorre, mayor será el monto de la jubilación. Para eso es la cuenta 2, que pocos usan porque no pueden o no les convence.
No hay que dejar de tener presente que nadie tiene el 100% de sus cotizaciones en el sistema de AFP porque partió en 1981, hace 32 años. Nadie puede jubilar solamente con dinero en las AFP.
Todos tienen bonos de reconocimiento, es decir, el ahorro acumulado en el anterior sistema, ya que ahora las cuentas de capitalización son individuales, por lo que los montos cambian según cada caso. Por ejemplo, dos personas que ganan el mismo sueldo, pueden recibir jubilaciones distintas.
No obstante, la realidad revela que la mayoría de los que hoy jubilan, con suerte, obtienen la mitad de su actual ingreso, mientras que las administradoras aumentaron en 38% sus ganancias, 582 millones de dólares sólo el año pasado.
Negocio redondo… pero ¿para quién? Para las administradoras por supuesto.