Durante la madrugada del sábado, mientras realizaban controles vehiculares en el sector, carabineros del Retén Quillagua se percataron de que un automóvil Station Wagon, marca Mitsubishi, modelo Montero realizó maniobras evasivas al verlos, tras lo cual se internaron en la pampa.
Al ver esta situación, personal policial se desplegaron por el lugar, acción que se vio dificultada por las características meteorológicas y geográficas del desierto, encontrándose con el vehículo abandonado a la altura del Km. 1.661 de la Ruta 5 norte, sin sus ocupantes en el interior.
Tras efectuar una revisión de la camioneta, la cual no presentaba encargo por robo, se encontraron 13 sacos de nylon en su maletero, en cuyo interior mantenían 509 paquetes de droga, los cuales fueron trasladados hasta la Segunda Comisaría Pozo Almonte para su pesaje y pruebas de campo por parte de Carabineros del OS-7, arrojando un peso total de 520 kilos 991 gramos de pasta base de cocaína.
Carabineros continuó con los patrullajes en el sector, encontrando otro vehículo marca Mitsubishi, modelo Katana, el cual mantenía en el pick up, doce sacos, tres bolsos, y dos maletas, los cuales contenían 659 paquetes de droga en su interior.
Las sustancias analizadas por Carabineros del OS-7, arrojaron un peso total de 669 kilos 907 gramos de pasta base de cocaína y 59 kilos 595 gramos de base de cocaína.
El Jefe de la Primera Zona de Carabineros Tarapacá, General Claudio Nash Berne, indicó que gracias a este procedimiento se decomisaron en total 1.190 kilos 898 gramos de pasta base y 59 kilos 595 gramos de base de cocaína.
“Gracias a las acciones preventivas realizadas por Carabineros fue posible sacar de circulación más de una tonelada de droga, equivalentes a 6 millones 252 mil 465 dosis avaluadas en más de 13 millones de dólares o 6 mil 252 millones 465 mil pesos” señaló el General.
Finalmente el Jefe de la Zona sostuvo que este decomiso es el más grande que hemos tenido en la región en el último período, lo cual nos tiene satisfechos porque es el resultado de un trabajo planificado y sostenido de acuerdo a los lineamientos del Plan Vigía de Carabineros, pero sabemos que aún hay mucho por hacer y nuestro compromiso es mantener nuestros servicios permanentes en las tres líneas de control establecidas en el Plan Frontera Norte, es decir en las zonas fronterizas, carreteras y urbanas, para continuar combatiendo el tráfico de drogas en la región”.