La inminente quiebra de la Clínica Alemana de Puerto Varas reunió a autoridades, parlamentarios y trabajadores del centro asistencial. Este viernes, le plantearán al Ministro de Salud, Jaime Mañalich, posibles salidas alternativas para así evitar el colapso y despido masivo de 400 trabajadores.
Un “Plan B” es lo que se necesita para salvar a la Clínica Alemana de Puerto Varas, centro asistencial que se mantiene en una situación crítica luego que hace 9 meses se informara de su insolvencia económica.
Parlamentarios, autoridades de Gobierno, el Directorio de la clínica y trabajadores concordaron en que agotarán todas las instancias posibles para evitar la quiebra.
Sin embargo, el diputado UDI Carlos Recondo reconoció que la situación es difícil de superar, indicando que si existe un plan alternativo éste no es suficiente para asegurar una atención de salud a los habitantes de la comuna.
En tanto, el diputado Fidel Espinoza señaló que como solución inmediata se deben arrendar dependencias de la clínica para seguir entregando atención medica, esperando a futuro que el Estado se haga cargo de la salud de los puertovarinos y no seguir dependiendo de un recinto privado.
Ernesto Opitz Minte, Director hace dos meses de la cuestionada clínica, dijo que lo que hoy le importa a la fundación es poder responderle a sus trabajadores, a quienes se le deben las imposiciones, pero aseguró que sus sueldos han sido pagados mes a mes.
Para el Ejecutivo la opción es arrendar los pabellones quirúrgicos con un costo anual de 300 a 400 millones de pesos, según afirmó el médico Rafael Merino, Director del Servicio de Salud del Reloncavi.
La Presidenta del Sindicato N°2 de la Clínica Alemana, Maritza Naudam, confía en que la solución que pudiese atraer a operadores sería el arriendo anunciado por el Servicio de Salud o el convenio judicial que asegure sus puestos de trabajo por lo menos en un año y medio más.
Para este viernes, durante la visita del ministro Mañalich a la zona, se ha gestionado una reunión para buscar posibles soluciones a la inminente quiebra de la Clínica Alemana de Puerto Varas.