Indignados se mostraron los habitantes de la comunidad mapuche huilliche Pepiukelén de Pargua, tras denunciar que la empresa salmonera Los Fiordos sigue vertiendo aguas contaminadas al Rio Allipén sin que ninguna autoridad hasta la fecha concurra al lugar para verificar lo acontecido.
Así lo expresó a La Radio el werkén de dicha comunidad integrada por aproximadamente seis familias, Francisco Vera, quien considera como inaceptable que tras el fallo de la Corte Suprema y de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt por desacato, lo que incluso arrojó medidas cautelares como arriago nacional contra el Gerente de la empresa, Jerardo Ortuya, sigan vertiendo residuos supuestamente contaminados al afluente.
Cabe recordar, que la última denuncia presentada con material gráfico ante Carabineros de Calbuco data del 17 de septiembre y, en paralelo, incluso intentaron contactar al Seremi de Medioambiente, Edgard Wilhelm, y al Gobernador de Llanquihue, Francisco Muñoz, quien se limitó a responder que sólo le competía coordinar acciones con la seremi subrogante pero que hasta la fecha nadie ha llegado.
Vera evidenció su resignación ya que encuentra insólito que nadie fiscalice el cumplimiento de sentencias, y que se permita a una empresa seguir provocando un daño medioambiental que podría perjudicar el hábitat del lugar.
Francisco Vera fue enfático en señalar que ellos no se oponen la desarrollo de la localidad, pero que las empresas deben cumplir con las exigencias del cuidado del entorno; elemento que a jucio del Werkén de la comunidad Pepiukelén la empresa pesquera de Agrosuper, Los Fiordos, ha incumplido en reiteradas oportunidades.
Según fuentes de La Radio, Los Fiordos habría presentado una solicitud de revisión de las medidas cautelares; instancia que se habría rechazado por parte de los ministros de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt.