La Organización para la Conservación de Cetáceos (0CC) presentará en semanas ante el Parlamento uruguayo una iniciativa para crear un santuario de ballenas y delfines en sus aguas jurisdiccionales, en medio de una temporada intensa de avistamientos en la costa uruguaya.
“La idea del santuario surgió junto a los niños de las escuelas de Maldonado (este) en el 2002, este año juntamos firmas a través de internet y el 5 de octubre -día nacional de la ballena franca- vamos a ir con esos niños a presentar la propuesta al Parlamento”, dijo a la AFP el director de OCC, Rodrigo García.
El santuario es una figura internacional creada “exclusivamente para la protección y conservación de ballenas y delfines”, si bien los primeros se desarrollaron en aguas internacionales, con el paso de los años se sumaron iniciativas dentro de aguas jurisdiccionales de varios países.
La iniciativa de Brasil, Argentina, Uruguay y Sudáfrica para crear un santuario en el Atlántico Sur fracasó a principios de julio pasado por tercera vez al no alcanzar el 75% de votos necesarios.
Con la propuesta “apuntamos a difundir las leyes existentes en Uruguay que prohíben la caza, persecución y captura de cetáceos; a su vez, como la figura del santuario es conocida internacionalmente esperamos que ayude a que se respete a estos animales”, añadió García.
En Latinoamérica existen santuarios en Brasil, Chile, República Dominicana, Costa Rica, entre otros, y la OCC tiene previsto difundir su proyecto para que Organizaciones No Gubernamentales de toda Latinoamérica lo apoyen.
A su vez, en Uruguay el santuario tendrá como padrino al reconocido y popular artista plástico Carlos Páez Vilaró.
La organización solicitará que el presidente uruguayo, José Mujica, oficialice el santuario ya que el mismo “tendría una importancia mayúscula en el desarrollo de la visibilidad del país en el exterior, lo jerarquizaría y promovería el turismo responsable de avistaje”, comentó.
En la última década, Uruguay desarrolló el turismo de avistamiento de la ballena franca austral, que entre julio y octubre se acerca a su costa Atlántica, en los departamentos de Maldonado y Rocha (este).
“Se acercan a la costa con su cría porque es un lugar resguardado para descansar antes de continuar su viaje al sur de Brasil, ellas están migrando desde zonas cercanas a la Antártida -donde se alimentaron- y ahora suben por el Altlántico”, comentó Mónica Lozano, encargada en el Ministerio de Turismo uruguayo del área de avistaje de ballenas.
“Al ser un periodo de distensión de los animales nos da el privilegio de verlas a pocos metros de la costa, retozando junto a su cría, es único”, agregó Lozano.
Este año, el Ministerio de Turismo implementó una vía de comunicación a través de una cuenta de twitter (@ballenasuy) en la que se pueden subir datos que permiten ubicar en tiempo real a las ballenas desde diferentes puntos de la costa.
“Se confirma cada año que la cantidad de ballenas van aumentando, los avistajes son cada vez más numerosos, se repiten a diario y siempre vemos los mismos comportamientos de reproducción y de cría que llevan a impulsar cada vez más el turismo” de avistamiento, concluyó Garcia.