Apoderados y consumidores denunciaron una colusión entre las editoriales de textos escolares y algunos colegios, con el fin de obligar a renovar estos libros todos los años. Acusaron además, que a los textos se les cambia la tapa para hacerlos pasar como nuevos.
Los denunciantes señalaron a 12 establecimientos, los que según la Corporación Nacional de Usuarios y Consumidores de Chile (Conadecus), han pedido libros específicos de las editoriales Santillana y SM, a las que además, se les habría permitido instalar puestos de venta al interior de los colegios.
Según el presidente de la agrupación ciudadana, Hernán Calderón, las editoriales sólo cambian las tapas de los textos, manteniendo el mismo contenido:
El presidente de la Asociación Metropolitana de Padres y Apoderados, Eduardo Catalán, agregó que los libros renovados elevan su precio de forma artificial:
En tanto, los locatarios de la calle San Diego de Santiago, se sumaron a la denuncia. Miguel Espinoza, de la Liquidadora de Libros, planteó que a los pequeños comerciantes las editoriales les cobran precios excesivos y que sólo buscan elevar sus ganancias.
Los dirigentes ciudadanos se reunieron con el Contralor General de la República, Ramiro Mendoza, quien señaló que se investigará la denuncia. Estos datos también fueron entregados a la Fiscalia Nacional Económica.
Sobre los contenidos de los textos, en el Ministerio de Educación aseguraron que ellos no tienen injerencia en lo que pidan las colegios privados o particulares subvencionados, ya que no pueden pasar a llevar la libertad de enseñanza.
Establecimientos denunciados:
- Colegio Lirima (Iquique)
- Escuela Básica Preciosa Sangre (Ñuñoa)
- Colegio Los Olmos (Puente Alto)
- Instituto Aleman (Puerto Montt)
- Colegio San Francisco (Paine)
- Sistema Educacional Lihona
- Colegio San Fernando (Peñalolén)
- Colegio Gabriela Mistral
- Colegio Apoquindo Masculino
- Colegio Salesiano (Valparaíso)
- Colegio Camilo Henríquez
- Colegio El Roble