Un estudio comprobó que tanto la obesidad materna como la falta de educación media contribuían a un temprano deterioro cognitivo de los bebés nacidos antes de las 28 semanas.
La investigación fue desarrollada en el Centro Médico Baptista Wake Forest de Estados Unidos, y para él se analizaron 921 niños nacidos entre antes de los 7 meses de gestación, entre 2002 y 2004.
De acuerdo con Madri+d, se llegó la conclusión de que la inflamación provocada por la obesidad podría dañar el cerebro de estos niños nacidos antes de tiempo, aumentando su riesgo de sufrir retraso en el desarrollo mental.
No obstante, no se pudo asegurar si esta inflamación causada por la obesidad de la madre se transmitía al feto.
Según Jennifer Helderman, coordinadora del proyecto, la obesidad es cada vez más frecuente en la población, lo que hace preocupante los resultados del estudio. Sin embargo se puede prevenir, ya que es un factor «potencialmente modificable durante el periodo previo a la concepción y el embarazo”.