La psicóloga especialista en abuso sexual, Adriana Sosman, explicó a “Bío-Bío en verano” los procesos que llevan a que personas de alta autoridad y jerarquía puedan cometer este tipo de delitos. El factor principal, de acuerdo a Sosman, es la influencia de poder y admiración que estos ejercen sobre adolescentes que todavía no están en condiciones para comprender lo que están pasando y que sólo lo llegan a entender años después, cuando llegan a ser adultos.
Lo anterior, luego de otra fuerte denuncia sobre abusos dentro de la Iglesia Católica, está vez en el Seminario San Rafael de Lo Vázquez, hecha por el ahora obispo protestante Mauricio Pulgar, cuando era seminarista católico. Los hechos denunciados habrían ocurrido a comienzos de la década de los 90 e involucran a sacerdotes importantes de la V región, como el actual obispo de la diócesis de Valparaíso, Gonzalo Duarte.
Según la psicóloga, cuando el abusador es una persona conocida para el abusado, la situación no se genera de la noche a la mañana, sino que se va construyendo con el tiempo a través de besos y caricias, tal como en el caso denunciado por Mauricio Pulgar; luego de esta etapa viene el abuso, cuando la víctima es obligada a aceptar lo que quiere el abusador mediante amenazas, tal como la negación de “acceder al cielo y ser aceptado por Dios”.
Esta situación puede durar años hasta que, según la especialista, el abusado se rebela de manera forzada porque un tercero descubre lo que ha ocurrido, o de forma espontánea ante años de abuso reiterado.
Escucha la entrevista realizada por Karen Cortés a la psicóloga especialista en abuso sexual a “Bío-Bío en verano” de Valparaíso y Viña del Mar: