¿Con frecuencia sientes presión en el pecho o te duelen los dientes cuando consumes algo helado? Si éste es tu caso es hora de ponerte en alerta, ya que podrían ser indicadores de que tu salud está en riesgo.
Así lo aseguraron en Women’s Health, página que dio a conocer algunos tipos de dolores que las personas jamás debieran ignorar.
1.- Dolor de pecho recurrente.
Debes poner ojo si, periódicamente, sientes una fuerte acidez o como si te estuvieran presionando la zona del pecho, ya que es probable que sean señales de problemas relacionados con el corazón e, incluso, de un ataque cardíaco. Ante ello, se informó que las mujeres debieran estar más atentas que los hombres si sienten cierta “presión, acompañada de fatiga, dolor de garganta o que les cuesta respirar”, indicó la cardióloga Elsa-Grace Giardina, pues en ellas los síntomas se manifiestan de manera más leve.
2.- Dolores de cabeza severos.
Pese a que las causas puedan ser diversas, cualquier dolor de cabeza severo (como aquellos en que sientes que te pegan con un martillo) que no esté acompañados de otros síntomas de la migraña, como aura o pródromos, merecen ser revisados. Sobre todo si se trata de “la peor jaqueca de tu vida” ya que, en el peor de los casos, podría ser una señal de aneurisma cerebral. Estos bultos arteriales se desarrollan en el 5% de la población, pero la mayoría del tiempo no provocan problemas previos a los afectados.
3.- Cuando sientes que tus dientes “palpitan”.
Si sientes que tus dientes “palpitan”, o te duelen cuando consumes cosas frías o calientes, lo más probable es que el nervio de tus dientes se haya dañado, generalmente, debido a que el esmalte está agrietado o podrido. Éste es un tipo de dolor al que debes poner atención porque, de no tratarlo, las bacterias en tu boca podrían infectar el nervio e incluso afectar otras partes de tu cuerpo, según indicó la dentista Kimberly Harms de Minnesota (EEUU).
4.- Dolor agudo en el lado derecho de tu cuerpo.
¿Te despertaste con un extraño dolor en tu lado derecho? Si crees que algo te “pincha” y, además, sientes náuseas y fiebre, lo más probable es que tengas apendicitis. Este problema, ocurre cuando un grupo de heces, u otros desechos, migran al espacio en que el apéndice se vacía en el colon, bloqueándolo. Esto, produce que el órgano se inflame peligrosamente.
Otra posibilidad, es que se trate de quistes ováricos. Por lo general, estos sacos llenos de fluidos no son dañinos y desaparecen por sí solos, pero si uno de estos llega a doblarse o romperse, puede causar un dolor difícil de soportar.