Este martes 4 de octubre, la Real Academia de Ciencias de Suecia anunció que el Premio Nobel de Física 2011 fue otorgado a tres astrónomos. Al respecto, se indicó que la investigación que dio pie a este galardón se realizó en tierras chilenas y por académicos de la Universidad de Chile.
El proyecto Calán/Tololo (C&T), realizado entre 1990-1996 y dirigido por el astrónomo de la Universidad de Chile Mario Hamuy, fue el primero en permitir la medición de distancias con un margen de error suficientemente preciso para medir la desaceleración del Universo.
Esta técnica fue posteriormente aplicada a supernovas lejanas por dos grupos de astrónomos internacionales, liderados por Saul Perlmutter (Supernova Cosmology Project) y Brian Schmidt (High-z Team). Al combinar los datos de Perlmutter y Schmidt con aquellos del proyecto C&T, ambos equipos encontraron que las supernovas distantes estaban un 20% más lejos que lo esperado.
El resultado tomó por sorpresa a toda la comunidad científica porque implica que el Universo está acelerándose en vez de frenarse. El origen de su aceleración se atribuye a una misteriosa energía oscura que constituye el 70% del Universo, cuyo origen se desconoce y ha remecido las bases mismas de la física.
El descubrimiento de esta acelaración significa una verdadera revolución de la astrofísica. Literalmente, amplió los límites de lo que imaginamos y entendemos e impuso enormes desafíos para los científicos.
Este martes los astrónomos Saul Perlmutter (Lawrence Berkeley Laboratory), Brian Schmidt (Australian National University) y Adam Riess (Johns Hopkins University) recibieron el máximo galardón de la ciencia, debido al descrubrimiento de la expansión acelerada del Universo.
Este descubrimiento se realizó principalmente desde suelos chilenos. La Real Academia de Ciencias de Suecia destacó que la mitad de las supernovas que condujeron directamente a este descubrimiento provinieron del trabajo del proyecto C&T, así como la técnica para medir distancias en el Universo.
El proyecto Calán/Tololo fue iniciado por astrónomos del Departamento de Astronomía de la Universidad de Chile y el Observatorio Inter-Americano de Cerro Tololo (Mario Hamuy, José Maza, Mark Phillips y Nicholas Suntzeff), con la colaboración de los investigadores Roberto Antezana, Roberto Avilés, Luis González, Robert Schommer, Lisa Wells y Marina Wischnjewsky.