Los estudiantes secundarios y universitarios descartaron volver a clases, luego que el ministro de Educación, Felipe Bulnes, condicionara las garantías para el diálogo a la normalización de las actividades académicas.
Retrasar la tramitación de los proyectos de ley relacionados con la educación que ya han sido enviados al Congreso; flexibilizar la fecha de finalización del primer semestre en las universidades; y recalendarizar el año escolar, son los ofrecimientos hechos por el ministro de Educación a los universitarios de la Confech para iniciar una mesa de diálogo.
Eso sí, el secretario de Estado condicionó estas garantías a que los estudiantes retornen a clases, dando por hecho este lunes, que esa es la voluntad estudiantil.
Sin embargo, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción, Guillermo Petersen, desmintió categóricamente al secretario de Estado.
El vocero de la Confech, y presidente de los estudiantes de la Universidad de Los Lagos, Patricio Contreras, señaló que para ellos es prioritario asegurar los fondos basales para las universidades tradicionales y el fondo de revitalización para las mismas, esto, a días que se inicie en el Congreso la discusión por el presupuesto de la nación para el año 2012.
Los secundarios de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones) ya decidieron sentarse a conversar con el Gobierno, sin embargo, la vocera metropolitana, Danae Díaz, aseguró que no regresarán a clases, si es que esa es la condición del Gobierno.
Los universitarios decidirán este martes, en una asamblea en el campus oriente de la Universidad Católica, si se sientan a conversar con el Ejecutivo.
Por su parte, los asesores del ministro Bulnes han sostenido diversas reuniones privadas con las distintas organizaciones estudiantiles, para sondear el “ánimo” de los dirigentes y anticiparse a las garantías que estos pudieran solicitar.