El consumo de refrescos en Chile ocupó el tercer lugar en América, siendo superado sólo por México y Estados Unidos, según un estudio divulgado el lunes a la prensa por organización internacional Oxfam y la ONG mexicana El Poder del Consumidor.
México alcanzó un récord de 163 litros per capita al año, de acuerdo a la investigación que reclamó gravar esas bebidas con una tasa de 20% y usar el dinero para combatir los problemas de salud que generan.
La ingesta de refrescos en México supera en un 40% al de Estados Unidos -hasta ahora el mayor consumidor mundial con 118,1 litros al año por persona-, según las estadísticas.
El tercer país de mayor consumo en el continente es Chile (116,2), seguido de Brasil (89,1), Colombia (65,3) y Perú (55,7), según las cifras recopiladas en los últimos dos años por el estudio realizado por el Centro Rudd de Estados Unidos para políticas sobre obesidad.
“Un impuesto de 20% a los refrescos provocaría una reducción en su consumo” y generaría ingresos fiscales de 2.300 millones de dólares, que podrían usarse para atender la obesidad, la diabetes y otros problemas de salud, explicó en conferencia de prensa Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor.
La reducción de la ingesta de bebidas gaseosas ayudaría además a bajar “el consumo de calorías y una mejoría de la economía de las familias, que gastan, en su mayoría, más en refrescos que en huevos, frijoles o tortillas”, agregó.
Por su parte Dolores Rojas, de Oxfam, subrayó que la sustitución cada vez mayor de bebidas tradicionales como los jugos de frutas naturales por productos embotellados ha convertido a México “en una fábrica de anémicos y obesos”.