El intendente del Bío-Bío, Victor Lobos recorrerá durante la semana gran parte de las aldeas de la región. La autoridad reconoció la precariedad que viven los damnificados.
Parlamentarios de la zona por su parte comprometieron un acuerdo político para lograr ley de excepción que permita agilizar los trámites y acelerar la reconstrucción.
Los vecinos de Caleta Tumbes recibieron la visita del Intendente del Bío-Bío, Víctor Lobos, quien por petición de los vecinos del lugar, acudió a constatar en terreno las condiciones en que viven los afectados por el terremoto y tsunami del 27 de febrero.
En la ocasión, se visitaron las 4 aldeas de caleta Tumbes. La primera fue San Juan. Allí, su presidente, Benedicto Manríquez, solicitó un grifo y soluciones rápidas para los malos olores provenientes de los baños.
El recorrido continuó hacia el sector de Borde Costero, donde las autoridades se reunieron con los pobladores, quienes manifestaron su satisfacción de que sus peticiones hayan sido acogidas, indicó Juan Torres, presidente de la aldea Borde Costero.
A la cita también llegó el seremi de Vivienda del Bío-Bío, Rodrigo Saavedra, quien dijo compartir la decisión de los vecinos de querer vivir en lugares cercanos al mar y para ello tendrán todo el apoyo técnico de su personal.
Por parte del Intendente del Bío-Bio, Víctor Lobos, tras realizar un balance de las visitas realizadas durante la semana, comenzando desde Tirúa hacia el norte, reconoció la precaria condición en la que viven los damnificados y que para eso van a trabajar.
Tras la visita, los parlamentarios de la zona, Cristián Campos, Jorge Ulloa y Alejandro Navarro, se comprometieron con el alcalde de Talcahuano, Gastón Saavedra y con los propios dirigentes, a iniciar un acuerdo político, que sea un real aporte para pedir una ley de excepción, que permita saltar todo el trámite burocrático.