Detectives de la Brigada de Investigación Criminal (Bicrim) Santa Cruz, en coordinación con personal del Servicio Nacional de Pesca, y en base a información recabada en la ciudad de Pichilemu, lograron dar con un mariscador, que mantenía en su poder más de 32 kilos de locos, listos para su comercialización, situación prohibida por estar esta especie en veda.

En coordinación con la Fiscalía Local de Pichilemu, se registró el domicilio de este pescador, ubicando en una dependencia anexa un congelador, en el que su interior se encontraban 564 unidades del molusco. Por ello, se procedió a su incautación y la detención del sujeto de 23 años, quien no portaba documento alguno que justificara su adquisición legal.

El detenido fue presentado ante el Tribunal de Garantía de Pichilemu en horas de esta mañana, mientras que las especies incautadas fueran entregadas a una institución de beneficencia de la ciudad de San Fernando.