Activistas argentinos levantaron hoy el bloqueo de un puente con Uruguay, iniciado hace más de 3 años en protesta por la instalación en ese país de una fábrica de celulosa que consideran contaminante del río fronterizo.
“Permaneceremos expectantes al costado de la ruta y seguiremos con nuestra acciones, Botnia es ilegal, contamina y debe irse de la cuenca del río Uruguay”, dijo un representante de los activistas ante cientos de personas. Los primeros automóviles comenzaron a dirigirse hacia el puente con Uruguay.
El bloqueo iniciado en 2006 fue levantado por 60 días a la espera de que se pongan en marcha mecanismos de vigilancia de la planta de celulosa de la corporación finlandesa UPM (ex Botnia) instalada en la ciudad uruguaya de Fray Bentos.
“Decidimos el levantamiento del bloqueo con firmeza y convicción, pero no nos resignamos. En caso de que los gobiernos no solucionen este conflicto, continuaremos y retornaremos con nuestra protesta masiva y pacífica”, decía la proclamada leída en la localidad de Arroyo Verde.
Largas filas de automovilistas esperaron la liberación del acceso al puente internacional General San Martín que une la ciudad argentina de Gualeguaychú (230 km al norte de Buenos Aires) y la uruguaya Fray Bentos, separadas por el limítrofe río Uruguay.
A cambio de suspender el corte, los asambleístas reclaman un monitoreo conjunto en la fábrica de capital finlandés, para verificar si contamina.
“Durante estos 60 días que empiezan a correr permaneceremos vigilantes” advirtió la asamblea al recordar “el compromiso de acordar controles dentro de Botnia y en el río Uruguay”.
También se exigió que “se informe al pueblo en forma veraz y completa” sobre los resultados de esos monitoreos y pidió que “se instrumenten controles a los buques que se dirigen hacia el puerto ilegal de Botnia y los camiones que transportan sustancias peligrosas” para la planta.